Este ha sido nuestro 4º año con Moroccoroads y la experiencia ha sido, como siempe, genial.  Este año nuestro viaje ha sido por la zona de Tafraout… ¡una maravilla!  No solo era la vista, era el sonido, plagado de ruiseñores, todo un deleite de los sentidos. Ellos hacen posible nuestros viajes en bici y sólo tenemos que preocuparnos de dar pedales porque al final de la etapa nos espera el campamento montado por el equipo de Morcoccoroads con una comida deliciosa y ¡cómo no, nuestro whisky bereber! un buen té verde. Gracias a Mustapha, Ismaêl, Mohamed y todos los que integran la «familia» de Moroccoroads por hacer de nuestros viajes, aventuras inolvidables.